¿Quién no ha oído hablar de los superalimentos? Esa lista de productos que parece tener superpoderes, aunque en realidad, lo que se consigue tomándolos es sacar provecho de su gran potencial nutritivo. No hacen milagros, pero sí que aportan más beneficios que otros.
La quinoa, el chocolate negro y el brócoli, entre otros, tiene el prestigio de llevar el prefijo súper en su nombre, pero no son los únicos, aunque sí los más conocidos. Sin embargo, otros alimentos aparentemente más simples (y más baratos) cumplen las mismas funciones:
1. EL KIWI
A pesar de que creemos que la naranja es la fruta que más vitamina C nos puede aportar, comer un solo kiwi garantiza casi en su totalidad la ingesta recomendada diaria de este antoxidante. Además, esta fruta posee un 20% más de potasio que los plátanos y es una fuente de vitamina E.
2. SETAS EN VEZ DE BRÓCOLI
Además de ser mucho más apetecibles las primeras que el segundo, la ingesta de setas evita la hinchazón abdominal que puede provocar el brócoli. Por otra parte, ayudan a prevenir el cáncer (según un estudio de la Universidad de Pensilvania) y estimula el desarrollo de las defensas (estudio conjunto entre la Universidad de Pensilvania y Arizona).
3. SARDINAS POR SALMÓN
Además de que son más baratas, son igual de ricas en omega-3 y tienen menos cantidad de mercurio. También son una gran fuente de vitamina D.
4. PIPAS DE CALABZA VS. CHOCOLATE NEGRO
Además de la diferencia de precio, al comer un puñado de pipas de calabaza te ahorras la cantidad de grasas y calorías del chocolate. Cargadas de magnesio y triptofano se presentan como una interesante opción al menos hasta que se consiga la tableta de chocolate no calórica.
5. SANDÍA EN VEZ DE TOMATE
Refrescantes ambos en verano, pero la sandía contiene una cantidad mayor de licopenos, un elemento que previene el cáncer de cuello de útero y de ovarios. Además, posee altos niveles de vitamina A, muy importante para el buen estado de los huesos y la vista y de fibra.
6. ACELGAS POR ESPINACAS
Según la Universidad de Tufts las acelgas contienen mucha vitama B y es una fuente de ácido fólico, un elemento indispensable durante el embarazo y el periodo de lactancia.
Fuente: El Confidencial